¿Qué es? El agua es un líquido incoloro, inodoro e insípido y es la bebida por excelencia. Es un componente primordial de la naturaleza además de ser el componente principal de nuestro cuerpo, donde realiza importantes funciones. La importancia del agua es tal que una persona puede sobrevivir más de un mes sin comer, pero sólo unos días sin beber agua. El agua representa aproximadamente las dos terceras partes del peso de nuestro cuerpo. Por ejemplo: si una persona pesa 70 kg, 43 kilos serían de agua. Sin embargo, la proporción de agua en nuestro organismo varía según el sexo y la edad. Las mujeres al tener más tejido adiposo (grasa) y menos masa muscular que los hombres tienen alrededor del 50 al 55% de agua, mientras que los hombres tienen más. En el recién nacido el porcentaje de agua es de 80%, cifra que va disminuyendo con la edad, llegando a valores de 50% en personas de edad avanzada.
Equilibrio entre la cantidad de agua ingerida – eliminada
El contenido de agua de nuestro cuerpo se mantiene constante gracias a que existe un equilibrio entre la cantidad de agua que ingerimos y la que excretamos.
En un adulto sano que vive en un clima templado y realiza una actividad física moderada, las pérdidas diarias de agua son de aproximadamente 2,6 litros, repartidos entre orina (1,5 L), evaporación por la piel (0,5 L), pulmón (0,4 L) y a través de las heces (0,2 L).
Para compensar estas pérdidas, su organismo requiere 2,6 litros diarios para realizar sus funciones. De ellos, 1 litro se obtiene del agua contenida en los alimentos, 0,3 litros a partir de la digestión y utilización de los nutrimentos y los 1,3 litros restantes se obtienen del agua que consume.
¿Qué cantidad de agua se recomienda consumir?
Esto depende de cada individuo, así como de las condiciones ambientales, fisiológicas o patológicas en que se encuentre. Sin embargo, en general y salvo en casos donde exista peligro de retención de líquidos en el organismo (problemas renales o cardiacos) se recomienda beber de 1,5 litros a 2 litros diarios de agua para satisfacer las necesidades del organismo.
¿En qué casos debe aumentarse el consumo de agua?
El consumo de agua debe incrementarse en los siguientes casos:
– Cuando realizamos un ejercicio físico intenso.
– Durante la lactancia.
– En temperaturas ambientales elevadas.
– Cuando tenemos fiebre.
– Cuando tenemos gripe.
– En caso de vómitos y/o diarreas.
– En caso de infecciones urinarias.
Todas estas situaciones aumentan las pérdidas lo cual puede llevar a deshidratación.
¿ Por qué es importante consumir agua?
El agua realiza diferentes funciones en nuestro cuerpo, entre las que destacan:
– Formar parte de todos los líquidos corporales: sangre, linfa, secreciones digestivas, heces y orina.
– Ser el medio en el que se llevan a cabo las reacciones químicas del organismo.
– Transportar nutrimentos al interior de las células y posibilitar a su vez la eliminación de los productos de desecho de las mismas.
– Intervenir en la utilización de los alimento facilitando su digestión y absorción.
– Ayudar a dar forma y volumen a las células.
– Mantener la temperatura corporal, mediante la evaporación del agua contenida en el sudor.