Muchas mujeres consideran la pérdida de peso como una utopía, algunas de ellas pasan horas y horas en el gimnasio, mientras que otras disminuyen increíblemente su consumo de comida, todo esto con la finalidad de lucir esbeltas, sin embargo una gran cantidad de ellas no logra cumplir con la tan anhelada meta, esto es debido a que en gran parte están cometiendo una serie de errores que afectan su metabolismo y hacen que este se convierta en su principal enemigo al momento de perder peso, conoce a continuación cuáles son estos errores para que desde hoy evites cometerlos de nuevo.
Saltarse el desayuno
Al despertar por las mañanas lo normal es que tu organismo necesite nutrientes, ya que todas tus reservas de ellos fueron consumidos durante las ocho horas que dormiste, por lo que uno de tus primeros deberes del día es reponerlos, si no lo haces tu cuerpo comenzará a valerse de tus músculos para obtener la energía que necesita, esto lo hará descomponiendo los mismos en nutrientes, lo cual afectará la capacidad de tu metabolismo para quemar las grasas que consumas a lo largo de tu día.
Comer poco
Comer menos de lo habitual no significa que por ello perderás medidas, de hecho esto puede ocasionar todo lo contrario e inclusive generarte muchos más problemas de lo que piensas, ya que si no comes lo suficiente a lo largo del día entonces al final de tu jornada te sentirás agotada por lo que necesitarás consumir una gran cantidad de calorías para que tu organismo se normalice, lo cual sólo llevara que irremediablemente aumentes de peso.
No dormir adecuadamente
Mientras duermes quemas calorías, esto es un hecho comprobado científicamente y ocurre debido a que al dormir tu cuerpo entra en un estado de relajación y comienza a usar las calorías en forma de grasas para recuperar las energías perdidas a lo largo de tu día a día, por lo que es evidente que si no mantienes una rutina adecuada de sueño este proceso se verá alterado, además esto también genera que los niveles de cortisol en tu sangre se eleven lo cual te provocara una molesta sensación de hambre que deberás saciar, aumentado así tu ingesta calórica.
Leete este artículo y disfruta del maravilloso mundo de los desayunos.